Baños con alicatado a media altura
En el diseño de interiores contemporáneo, los baños se han convertido en auténticos espacios de bienestar, donde cada detalle cuenta. Una de las tendencias que más fuerza ha cobrado en los últimos años es el alicatado a media altura, una solución que combina estética, practicidad y libertad creativa. Este recurso permite jugar con texturas, colores y materiales para generar ambientes equilibrados y con personalidad, sin renunciar a la protección y durabilidad que ofrece el revestimiento cerámico.
En Dune Cerámica, exploramos constantemente nuevas formas de expresar la belleza a través del material cerámico. Nuestras colecciones ofrecen opciones adaptadas a esta tendencia, desde piezas de acabado artesanal hasta propuestas más contemporáneas, para crear baños con alicatado a media altura con carácter, personalidad y armonía visual.
¿Qué es el alicatado a media altura?
El alicatado a media altura consiste en revestir únicamente una parte de la pared -habitualmente hasta la mitad o tres cuartos de su altura- con material cerámico, dejando el resto pintado o decorado con otro acabado. Esta técnica, que combina revestimiento y superficie lisa, permite jugar con contrastes visuales, texturas y colores, aportando dinamismo y equilibrio en el baño.
A diferencia del alicatado completo, donde las paredes se revisten íntegramente con cerámica, el alicatado parcial ofrece una estética más ligera y versátil. Es ideal para quienes buscan un baño moderno y funcional, sin recargar el espacio ni renunciar a la protección frente a la humedad en las zonas más expuestas al agua.

Ventajas y beneficios del alicatado a media altura
El éxito del alicatado a media altura no es casual. Esta tendencia se ha convertido en una de las favoritas de interioristas y diseñadores por su capacidad de unir practicidad, estilo y eficiencia en un mismo concepto. A continuación repasamos sus principales ventajas:
- Ahorro de materiales y mano de obra. Al revestir sólo la parte inferior de las paredes, se reduce considerablemente la cantidad de cerámica necesaria y, con ello, también el tiempo de instalación. El resultado es un proyecto más económico y sostenible, sin sacrificar la calidad ni el diseño.
- Mayor libertad estética. El alicatado a media altura abre la puerta a infinitas combinaciones. En la parte superior, se puede aplicar pintura decorativa, papel pintado o incluso revestimientos de textura natural, creando contrastes visuales únicos. Esta versatilidad permite personalizar el baño y adaptarlo a distintos estilos: desde el minimalismo nórdico hasta el maximalismo más colorista.
- Sensación de mayor amplitud visual. Revestir solo una parte de la pared aporta ligereza y profundidad al espacio, especialmente en baños pequeños o con poca luz natural. Al dejar una franja superior sin cerámica, las paredes parecen más altas y el ambiente más despejado.
- Mantenimiento más sencillo. La zona revestida protege las paredes frente a la humedad y las salpicaduras, mientras que las partes superiores resultan fáciles de renovar con una nueva capa de pintura o un cambio de papel. Esto convierte el alicatado a media altura en una opción práctica y duradera para quienes buscan un baño bonito, funcional y fácil de mantener.

¿Hasta qué altura alicatar?
Una de las preguntas más comunes al planificar un baño con alicatado a media altura es hasta qué punto subir el revestimiento cerámico. Aunque no existe una regla fija, sí hay altura orientativas que ayudan a lograr equilibrio visual y funcionalidad. De hecho, estas son las alturas recomendadas:
- 90 cm: es la medida más habitual, ya que coincide aproximadamente con la altura de los sanitarios. Ofrece un efecto visual proporcionado y deja espacio suficiente en la parte superior para jugar con pintura o decoración mural.
- 120 cm: Esta opción proporciona una mayor protección frente a la humedad, ideal para baños de uso intensivo o zonas donde se busque un aspecto más envolvente.
- Hasta el borde del lavabo o mueble: Una solución muy práctica que garantiza continuidad visual y facilita la limpieza. Además, permite delimitar zonas dentro del baño, diferenciando el área del lavabo del resto del espacio.
Además, detallamos alguno de los factores técnicos a tener en cuenta:
- Altura del techo: en baños con techos bajos, un alicatado demasiado alto puede restar amplitud visual. En cambio, si el techo es alto, se puede jugar con alturas mayores sin sobrecargar el ambiente.
- Zonas húmedas: en áreas expuestas directamente al agua -como la ducha o la bañera- se recomienda alicatar hasta el techo para proteger las paredes y prolongar la vida útil del revestimiento.
- Distribución del mobiliario: la ubicación de lavabos, espejos y armarios influye en la altura ideal. Lo importante es que el alicatado armonice con los elementos del baño y aporte continuidad al diseño.



Materiales y acabados recomendados
El éxito de un alicatado a media altura no depende solo de la altura o a distribución, sino también de la elección del material y el acabado cerámico. Estos elementos determinan la estética final del baño y su durabilidad en el día a día.
Revestimientos cerámicos ideales para alicatado parcial
Los azulejos cerámicos son la opción más común para esta tendencia, gracias a su amplia variedad de diseños, texturas y formatos. Resultan perfectos para revestir las zonas bajas, donde se requiere una superficie resistente a la humedad, y permiten combinarse con pintura, papel vinílico o microcemento en la parte superior, creando composiciones equilibradas y actuales.


Diferencias entre cerámica y porcelánico
Aunque ambos materiales comparten prestaciones de resistencia y durabilidad, existen diferencias clave entre el porcelánico y la cerámica, aunque en muchos proyectos se combinan ambos materiales, aprovechando sus cualidades específicas para cada área.
- La cerámica es más ligera y fácil de cortar, ideal para paredes interiores y zonas decorativas.
- El porcelánico, por su parte, ofrece mayor densidad y menor absorción, lo que lo convierte en la opción preferida para zonas de contacto directo con el agua, como duchas o paredes cercanas al lavabo.


Texturas, formatos y colores
El alicatado a media altura invita a jugar con texturas y volúmenes. Los relieves sutiles aportan profundidad, mientras que los acabados brillantes reflejan la luz y amplían visualmente el espacio. En cuanto a formatos, los azulejos pequeños tipo “metro” o mosaico son perfectos para un estilo clásico o vintage, mientras que los grandes formatos transmiten una sensación de continuidad y modernidad.
En la paleta cromática, los tonos neutros -blancos, grises y beiges- siguen siendo los grandes protagonistas por su capacidad para aportar serenidad y amplitud. No obstante, los colores intensos y acabados metálicos o esmaltados ganan terreno en baños de diseño más atrevido, aportando un toque de sofisticación y personalidad.




Inspiración e ideas para baños alicatados a media altura
El alicatado a media altura es un recurso decorativo muy efectivo para baños: permite dividir visualmente la pared, resaltar la zona inferior con un revestimiento más gráfico o texturado, y mantener la parte superior más despejada para prolongar la sensación de altura. Aquí te ofrecemos ideas inspiradoras para aplicar esta técnica usando algunas de nuestras colecciones. ¡Empezamos!
Estilo nórdico: serenidad minimalista con materiales cálidos
En un baño de inspiración nórdica, la clave está en combinar la claridad visual con texturas suaves y materiales naturales. En la zona inferior se podrían incluir tonos claros mientras que en la parte superior alisar en pintura blanco roto o beige muy pálido. El efecto: una base firme y texturada que aporta carácter junto a una parte superior que aporta amplitud y luz. Puedes acentuar el look con mobiliario en madera natural, accesorios en metal mate y textiles en lino blanco o gris claro. Este tipo de combinación dota al baño de una estética limpia, tranquila y contemporánea.
Otro enfoque nórdico sería utilizar alicatado en formato pequeño en tonalidades beige muy suaves y en el resto de pared azulejos de gran formato en una tonalidad similar, que cree un baño en beige precioso y con personalidad, tan de moda en estos momentos.

Estilo mediterráneo: frescura, color y luz costera
Para un ambiente mediterráneo que evoque la brisa del mar y la ligereza del litoral, se puede apostar por azulejos alicatados hasta media altura en tonalidades azul marino o verde agua, cuya textura y acabado evocan la arena mojada y las olas suaves. Arriba, la pared pintada en blanco cálido o blanco roto potencia la luz. La transición entre el azulejo y la pintura puede estar marcada por un listel sutil que aporta un detalle sofisticado.
Otra variación mediterránea sería apostar por un alicatado a media altura con azulejos efecto madera, combinado con un azulejo que nos recuerde el color y el movimiento del mar, como es nuestra serie Sea.

Estilo industrial: carácter urbano y materiales auténticos
En el estilo industrial, juega la carta del contraste fuerte, los materiales robustos y las texturas que muestran huella humana. Para este ambiente, puedes optar por una combinación de tonalidades oscuras y azuladas, que representan la potencia de este estilo, junto con otras más calmadas para generar un equilibrio que dote al espacio de continuidad sin interrupciones. Además, el toque más urbano se puede añadir con una encimera de patas metálicas negras y una madera rústica y con personalidad, que da ese toque de loft neoyorquino.

Estilo contemporáneo: elegancia sobria y diseño depurado
Para un baño contemporáneo, la apuesta es por materiales nobles, líneas limpias y un equilibrio entre sobriedad y detalle. Puedes alicatar la zona inferior, o una pared, hasta media altura con un azulejo de imitación mármol. En la otra parte, añade un azulejo oscuro, que siempre genera sofisticación y elegancia.

Estilo rústico-moderno: textura, calidez y carácter artesanal
Para espacios que buscan un aire más cálido, rústico pero actualizado, el alicatado a media altura permite crear una base acogedora que al mismo tiempo es elegante. Complementa con vigas de madera vista o repisas de madera envejecida y grifería en acabado bronce u oro envejecido. Este enfoque consigue un baño que transmite sensación de refugio, naturalidad y autenticidad.

Los baños con alicatado a media altura ofrecen un sinfín de posibilidades decorativas, y las colecciones de Dune Cerámica son el aliado perfecto para llevarlas a cabo. Su variedad de texturas, acabados y colores permite crear composiciones equilibradas, en las que el diseño y la funcionalidad conviven en armonía.
En definitiva, el alicatado a media altura no solo es una solución estética, sino también práctica y duradera: cada baño puede transformarse en un espacio lleno de personalidad, equilibrio y diseño atemporal.