Restaurantes
El diseño de este restaurante valenciano centrado en la cocina sostenible, se basa en recrear un ambiente que evoque contacto constante con la materia prima y el medio ambiente. Gracias a la creatividad de Carlos Carrillo y Pablo Poblet, de Tres Cinco Uno Estudio Creativo, este espacio gastronómico cuenta con una decoración que se mimetiza a la perfección con la cocina de proximidad.
Piezas utilizadas en el proyecto
Imágenes del proyecto
En el momento en el que Tres Cinco Uno Estudio Creativo recibió el encargo de crear Margarito Grill tuvieron claro que el espacio debía transmitir los sólidos valores con los que había nacido el restaurante: respetar el medio ambiente y apostar por una alimentación sostenible.
Para ello, Carlos Carrillo y Pablo Poblet, encargados de diseñar el proyecto de interiorismo, no perdieron de vista en ningún momento las señas de identidad de este nuevo espacio culinario, centrados en la cocina responsable, saludable y con productos de proximidad minuciosamente seleccionados. Bajo estas premisas cocinaron a fuego lento toda la decoración de las estancias del restaurante valenciano.
Paleta de colores para representar la huerta valenciana
El hilo conductor no solamente estuvo presente a la hora de diseñar Margarito Grill, sino que también fue la clave para escoger los materiales, decorar las paredes y, por supuesto, seleccionar la paleta de colores. Concretamente, el estudio creativo seleccionó una gama cromática con tonos que reflejaran la esencia de la tierra, con una fuerte presencia de colores ocres, terrosos y amarillos.
Para completar, Carrillo y Poblet escogieron pinceladas de tonos verdes para transmitir la frescura de la vegetación. En definitiva, la identidad de Margarito Grill representa la huerta valenciana en sus diversas estaciones del año y con sus respectivos tiempos de cultivo.
Diseño que impulsa el valor de los platos
Y es que los encargados de idear la decoración tenían como claro objetivo crear un ambiente fresco, natural y con aires mediterráneos. Para ello apostaron por vestir las paredes con enormes tapices artesanos, láminas de vistas cenitales de campos valencianos, espejos y mucha vegetación por todo el espacio.
Por lo que respecta a los productos Dune, el azulejo Atelier Toffee Glossy confiere personalidad al restaurante con su acabado brillante y su tonalidad inspirada en la tierra. Su colocación en vertical aumenta la sensación de altura a las paredes y crea un ambiente natural para disfrutar de la cocina de calidad.
Cabe mencionar el gran protagonismo que acapara el enorme olivo que preside la sala principal. Asimismo, no hay que pasar por alto la multitud de espejos circulares que generan infinidad de destellos por toda la sala, con los que se hace un guiño a los reflejos que se producen en los campos de arroz de la Albufera.
Como resultado, Carlos Carrillo y Pablo Poblet han logrado plasmar a la perfección la idea inicial: recrear un espacio que, a través de materiales, texturas y diseños, refleje el terreno y la materia prima. Con todo, Margarito Grill, ubicado en Valencia, es una excelente opción para degustar cocina elaborada con productos de calidad y disfrutar de un ambiente natural y fresco. ¿Mesa para comer?